El 15’55 por ciento de los menores de 15 años de Castilla y León tiene sobrepeso
CGP/DICYT Según los últimos datos del Ministerio de Sanidad, el 15’55 por ciento de los jóvenes menores de 15 años de Castilla y León tiene sobrepeso, el estado previo a la obesidad. De ellos el 7’62 por ciento ya son obesos, es decir, han entrado en estado patológico y tienen mayor riesgo de sufrir “diabetes, problemas cardiacos, alteraciones de tipo intestinal e incluso algunos tumores como el de esófago o el de colon”. Así lo han puesto de manifiesto hoy Francisco Javier Álvarez Guisasola, consejero de Sanidad, y Juan José Mateos, consejero de Educación, quienes han presentado las medidas que ha adoptado la Junta de Castilla y León en materia de vigilancia y control de la seguridad alimentaria y educación para la salud con el objetivo de reducir la obesidad infantil.
Guisasola ha subrayado que coinciden “casi en el cien por cien” con las propuestas realizadas por la ministra de Sanidad, Trinidad Jiménez, en el Consejo Interterritorial de Salud celebrado el pasado miércoles. Asimismo, ha detallado que la colaboración con las consejerías de educación, como ya ocurre en Castilla y León, se pondrá sobre la mesa en la próxima reunión, después del verano.
El consejero ha ofrecido otros datos, como que uno de cada cien menores de 15 años (concretamente el 0’8 por ciento) se incorpora cada año a este porcentaje de jóvenes obesos. Del mismo modo, ha señalado que Castilla y León se encuentra por debajo de la media nacional tanto en sobrepeso (la media es del 18’67 por ciento), como en obesidad infantil (con una media del 8’94 por ciento), y que es importante incidir en la prevención tanto en el colegio como en el propio ámbito familiar, ya que se estima que en la mitad de los niños obesos alguno de sus padres también lo son.
En cuanto a las medidas adoptadas, Guisasola ha recordado que en 2009 se realizaron 1.579 inspecciones en comedores escolares de los que solo 15 presentaron alguna deficiencia. Además de la higiene en diversos campos, se controlan los procesos relacionados con los alimentos o la correcta gestión de los riesgos sanitarios. Otro ámbito de intervención es la promoción y educación para la salud. Por ejemplo, a través de la Dirección General de Salud Pública e I+D+i se participa activamente en la estrategia nacional NAOS para la nutrición, la actividad física y la prevención de la obesidad; y en el Programa Perseo, una experiencia piloto desarrollada en 67 colegios (10 de ellos de la región) para, por un lado, dotar de un clima de opinión favorable a una buena alimentación y a la importancia del ejercicio físico; y por otro, controlar la prevalencia del sobrepeso y la obesidad.
Educación en nutrición
Por su parte, Juan José Mateos ha hecho hincapié en la educación en nutrición en dos grandes áreas, “los comedores, grandes aulas de conocimiento de la dietética; y el desarrollo del conocimiento y la información a favor de la cultura de una buena alimentación”. El consejero ha apuntado que existen 483 comedores públicos en Castilla y León, de los que sólo 138 se encuentran en núcleos urbanos. En total, 39.241 niños acuden a estos centros que son gestionados mediante contratos de servicio público.
Tal y como ha precisado, las empresas concesionarias tienen la obligación de solicitar la autorización sanitaria, fomentar la seguridad alimentaria, mantener las instalaciones, equipamientos y utensilios en perfectas condiciones de uso y garantizar a los usuarios “una alimentación equilibrada y el servicio adecuado a los alumnos que deban llevar una alimentación especial, adaptando los menús a problemas puntuales tales como diarrea, vómitos, hipertemia o procesos catarrales o gripales.
No obstante, Mateos ha recalcado que “una nutrición correcta se lleva a cabo en los colegios pero también es necesario que sea desarrollada en el ámbito doméstico”. En este sentido, además de actividades de formación dirigidas al profesorado, en 2011 se organizarán cursos para las familias sobre los hábitos saludables en alimentación.