Tecnología España Le贸n, León, Jueves, 10 de julio de 2008 a las 17:36

"En 2014 puede haber microorganismos dise帽ados para producir hidr贸geno y electricidad"

V铆ctor de Lorenzo, profesor de investigaci贸n en el Centro Nacional de Biotecnolog铆a (CSIC)

IGC/DICYT Uno de los grandes problemas que se afrontan hoy día, tanto por la Ciencia como por la Economía, es la cuestión de la energía. Diversas líneas de investigación tratan de obtener energía con un coste razonable y sin generar contaminación. Una de las más prometedoras es la utilización de bacterias para producir hidrógeno o electricidad, una posibilidad que, según Víctor de Lorenzo, profesor de investigación en el Centro Nacional de Biotecnología (CSIC), será factible en menos de una década. El experto imparte esta semana un seminario sobre las aplicaciones medioambientales de la Biotecnología en Inbiotec (León).

 

Según ha declarado a DiCYT de Lorenzo, "en los últimos años se ha producido un cambio de énfasis en las aplicaciones medioambientales de la Biotecnología, desde las aplicaciones para tratar de contrarrestrar la contaminación hasta la producción de energías renovables". En opinión del experto, "en pocos años veremos grandes avances en este campo". Uno de los grandes proyectos en este sentido que destacó de Lorenzo consiste en obtener bacterias que produzcan grandes cantidades de hidrógeno y electricidad a partir de residuos industriales. "Es algo factible y se estima que en el horizonte de 2014 pueda haber microorganismos diseñados para esto".

 

El hidrógeno es un gas cuya utilidad como vector energético "está comprobada" (hay vehículos que lo utilizan, bien su combustión, bien en forma de 'pilas de combustible'). Por otra parte, "hay microorganismos cuyo funcionamiento implica el movimiento de electrones, que, en un contexto adecuado, se puede aprovechar para generar una corriente eléctrica", argumenta de Lorenzo. "Los microorganismos pueden ser utilizados por los biotecnológos para mejorar las propiedades beneficiosas que tienen de por sí", resume el investigador del CSIC, para quien la Biotecnología ha experimentado una gran revolución gracias a la Genómica, la capacidad de secuenciar la totalidad del genoma de los seres vivos.

 

Reducir la toxicidad del arsénico

 

"Hace un década obtener el genoma de una bacteria con un cromosoma pequeño suponía un gran esfuerzo, algo que hoy día se puede hacer en unas horas". Para de Lorenzo, disponer del ADN de seres vivos ofrece a los investigadores "una especie de catálogo de actividades biológicas que podemos utilizar para programar agentes biológicos en determinadas aplicaciones". En el campo de la biorremediación, por ejemplo, se han desarrollado bacterias que degradan petróleo (utilizadas en el caso del Prestige), así como otros microorganismos asociados a plantas para reducir la toxicidad creada por metales pesados en el suelo (método empleado en Aznalcóllar). "En este campo hay perspectivas de futuro interesantes", asegura el experto. "En nuestro laboratorio trabajamos para programar plantas y tratar de reducir así las formas más tóxicas de arsénico en otras menos peligrosas".