Ciencias Sociales Uruguay , Uruguay, Martes, 16 de mayo de 2017 a las 07:27

Global Home Index: un estudio sobre la familia

Investigadoras presentaron los resultados de un proyecto mundial de la Home Renaissance Foundation de Londres, en el que colaboraron economistas de la UM

UM/DICYT “¿Vieron lo que pasa cuando uno entra a una sala donde falta el aire y se da cuenta de lo necesario que es cuándo no está? No tenemos que esperar a que nos falten las cosas valiosas para darnos cuenta que son importantes”. Con este ejemplo se refirió la Dra. Patricia Debeljuh, directora del Centro Walmart Conciliación Familia y Empresa del IAE Business School, al foco de la investigación liderada por la Home Renaissance Foundation (HRF), con sede en Londres y colaboradores en distintos países, sobre un tema tan natural como esencial: la familia.


Debeljuh y la directora ejecutiva de HRF Mercedes Jaureguibeitia, presentaron en la UM los resultados del estudio “Global Home Index” sobre la valoración de la familia a nivel social. Para el trabajo, los investigadores evaluaron 5000 respuestas de hombres y mujeres de entre 25 y 65 años de 20 países de los cinco continentes.


La iniciativa del think tank HRF (en español, “laboratorio de ideas” en el que participan expertos de distintas áreas con fines de investigación) tuvo el apoyo de universidades e instituciones internacionales, entre ellas, el Centro de Investigación en Economía Aplicada de la UM. Como representante de este centro, participó del encuentro la Ec. Magdalena Blanco, quien expuso los datos de Uruguay.


Los resultados obtenidos a nivel mundial revelaron que más del 80% de los encuestados considera importante ocuparse de las tareas del hogar y el 60% cree que este tipo de actividades contribuye a desarrollar competencias para otras áreas de la vida. Sin embargo, el 76% afirma que la sociedad valora más el éxito profesional que el cuidado de la casa y la familia.


El último resultado se manifiesta en otras dos respuestas: más de la mitad de los encuestados considera que no dedica tiempo suficiente a las tareas del hogar y, en el mundo de las maestrías, doctorados y cursos de especialización, menos del 15% se capacita para este tipo de trabajo.


“A veces admiramos cosas del primer mundo, pero también ese primer mundo nos enseña a valorar muchas de las cosas que tenemos en estas latitudes”, dijo Debeljuh. Sobre esto, afirmó que en muchos países del hemisferio norte es cada vez más latente la pérdida del sentido de la familia. Ilustró esta realidad con una imagen muy significativa, contó que en estos países hay muchos arquitectos que a la hora de diseñar una casa no se plantean colocar una mesa.


Explicó que este fenómeno es, por un lado el resultado y, por otro, el promotor, de que probablemente no haya comidas en familia, de que los padres no se sienten con sus hijos para ayudarlos a hacer los deberes, de que no haya juegos de mesa en los que participen las personas de la casa, entre otros.


“Es central en la vida de las personas —por más desarrollo profesional y aspiraciones en la vida social que tengamos— tener un hogar. Y aquellas que lo carecen, tienen una pérdida en su vida y, a veces, incluso en su propia identidad”.


Por estas razones, las investigadoras concluyeron que el valor de la familia es algo que trasciende el ámbito privado y debe formar parte de decisiones a nivel social a través de, por ejemplo, políticas públicas, legislación, política de las empresas, el mundo académico y la educación.