Tecnología España , Salamanca, Viernes, 05 de septiembre de 2008 a las 16:17

Los expertos se preparan para el reto de seguridad que suponen los futuros ordenadores cuánticos

El científico del CSIC Fausto Montoya explica en Salamanca las claves de un tipo de criptografía que tardará décadas en desarrollarse

JPA/DICYT La X Reunión Española sobre Criptología y Seguridad de la Información concluye hoy en Salamanca en una jornada marcada por la intervención de Fausto Montoya, científico del Instituto de Física Aplicada, perteneciente al Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), que ha intentado anticiparse al futuro en una conferencia sobre las posibles medidas de seguridad informática que deberán ponerse en marcha dentro de algunas décadas, cuando supuestamente se hayan desarrollado los ordenadores cuánticos, muchísimo más potentes que los actuales. 

 

"Los ordenadores cuánticos son una entelequia, puede que estén funcionando dentro de 50 ó 100 años", ha señalado el experto en declaraciones a DiCYT. En la actualidad, se encuentran en una etapa de desarrollo muy prematura, "lo que hay son elementos del ordenador cuántico que son tan grandes como una habitación, lo mismo que ocurría con los ordenadores primitivos, pero hasta que se puedan juntar todos estos elementos en poco espacio y sean operativos queda mucho tiempo", asegura. Con estos artefactos, las operaciones serían mucho más rápidas, ya que el ordenador cuántico no tendría bits, sino qubits (del inglés quantum bit, bit cuántico) "Sería una herramienta formidable para atacar a los algoritmos actuales, pero si hay un ordenador cuántico para atacar, también dispondrá de un ordenador cuántico el que cifre los códigos, es decir, habrán tenido que evolucionar todos los algoritmos, que serán distintos a los de hoy en día", tranquiliza el especialista. "Estaremos en la misma situación: alguien intenta romper un sistema y alguien intenta mejorarlo continuamente", concluye.

 

Montoya ha recordado que en España se realiza investigación en criptografía desde hace 60 años. "Nunca se ha parado, pero al principio íbamos muy despacio, España estaba muy aislada del exterior y la investigación sólo ha despegado desde 1975", afirma. "Al principio sólo se investigaba en el CSIC o el Ejército, pero ahora en todos los departamentos de Matemáticas de las universidades está presente, sobre todo porque la criptografía ha evolucionado y ahora se basa en teoría de números. Lo que antes era electrónico y tradicional se ha convertido en operaciones matemáticas y algoritmos muy complicados. Esto ha atraído a muchos científicos y el nivel es bueno comparado con el internacional", apunta.
 

En su opinión, "el usuario normal puede estar tranquilo desde el punto de vista técnico" con respecto a las operaciones que realiza en internet, "los sistemas no se rompen, los académicos podemos detectar algún mínimo fallo que no serviría ni para atacar los sistemas de seguridad más triviales, lo que pasa es que el usuario ordinario tiene que cuidarse de la ingeniería social, es decir, lo que hace el hacker es mandarte un correo y pedirte tu número de cuenta y tus claves, se lo das inocentemente y entonces es cuando te roba", advierte.