Alimentación España León, León, Miércoles, 18 de julio de 2007 a las 15:17

Una investigadora de la Universidad de León estudia la congelación de embriones de pez cebra para conservar la especie

Se trata de una especie originaria del Sudeste asiático muy empleada en la investigación de áreas como la genética

EFA/DICYT La bióloga, Sonia Martínez, ha investigado la viabilidad de la congelación de embriones de pez cebra con fines reproductivos y de preservación de especies protegidas. Martínez ha llevado a cabo este estudio en la Universidad de León, como parte de un proyecto de final de máster que está cursando en la institución y que versa sobre las metodologías de investigación en Biología Fundamental y Biomedicina. El objetivo fue analizar la viabilidad que tienen los embriones congelados para poder utilizarlos posteriormente.

La investigadora explicó que el pez cebra es originario del sudeste asiático y "tienen la particularidad de que se reproducen todo el año". En este sentido, indicó que este tipo de especie es la que más se utiliza para la investigación en áreas como la Genética. Además, este pez tiene una morfología transparente lo que hace mucho más sencillo y fácil su estudio.

En el proceso de estudio se han analizado y empleado también unas proteínas específicas que tienen propiedades anticongelantes y que se han hallado en peces procedentes del Ártico, los solla roja, que expresan dichas proteínas de una forma natural y evitan la congelación de la sangre. Estas proteínas impiden que crezcan los cristales de hielo en longitud, algo que sucede durante el proceso de congelación. “Al congelar y descongelar los embriones los cristales de hielo que se forman rompen las células y por este motivo, los embriones son inviables y no se pueden utilizar”, matizó.

La utilización de las proteínas de la solla roja favorece el proceso de congelación de los embriones y evita la ruptura de las células. “Incorporando estas proteínas se consiguen mejores resultados pero no embriones viables”, indicó Sonia Martínez. No obstante, recordó que este proceso conlleva beneficios en la mejora de la morfología de los embriones y en la supervivencia de las células.

Una alternativa


El proyecto final de master de Sonia Martínez intenta conseguir mejoras en la criopreservación de embriones aunque, hasta el momento, “nadie ha conseguido congelar embriones de peces”, insistió. En este sentido, la bióloga apuesta que esta es una posible alternativa para poder tener embriones congelados de especies de consumo, con fines reproductivos y de preservación de especies.