Salud España , Valladolid, Jueves, 22 de mayo de 2008 a las 17:20

La variabilidad genética y su influencia en la respuesta a medicamentos, a debate en la Facultad de Medicina

El director del Instituto de Farmacoepidemiología analiza en una charla el desarrollo de los estudios en los últimos años

YG/DICYT Algo menos del 9% de las personas que ingresan en urgencias es por haber sufrido alguna Reacción Adversa a Medicamentos (RAM). Estudiar las diferentes respuestas a los fármacos por razones de variabilidad genética es el objetivo de la Farmacogenética, una disciplina que, tras la secuenciación completa del genona humano, ha despertado el interés de la comunidad científica y las autoridades sanitarias. Explicar en qué consiste y la importancia de identificar las variantes genéticas que influyen en la susceptibilidad a desarrollar algunas de estas reacciones es el objetivo de la charla que hoy ofrecerá en la Facultad de Medicina de Valladolid el director del Instituto de Farmacoepidemiología, Alfonso Carvajal-Pando dentro del ciclo Investigación genética y enfermedad que viene desarrollándose desde el pasado mes de febrero.

 

El propio Instituto, ubicado en Valladolid, trabaja en un proyecto junto a otros laboratorios europeos cuyo objetivo es identificar las variantes genéticas que predisponen a padecer seis tipos concretos de reacciones adversas a medicamentos. Para ello, según ha explicado a DiCYT Carvajal-Pando, se prevé recopilar un determinado número de muestras de pacientes que hayan sufrido alguna de estas reacciones y posteriormente hacer estudios de asociación con el objetivo de poder llegar a relacionar las variantes con el rechazo a estos medicamentos.

 

A juicio del experto, los principales problemas con que se encuentra la Farmacogenética son el elevado coste de las pruebas genéticas, los problemas éticos que surgen por la confidencialidad de los datos o la falta de formación genética de los profesionales y autoridades sanitarias, lo que hace que las investigaciones en este campo no se traduzcan actualmente en mejoras para la práctica clínica. No obstante, el experto confía en que, una vez superados, se puedan llegar a recetar los medicamentos más apropiados para cada persona.

 

Vigilancia de medicamentos

 

Pero la principal tarea a la que se dedica el Instituto de Farmacoepidemiología es la de desarrollar los programas de farmacovigilanica recogiendo toda la información sobre problemas asociados a los medicamentos en la región. Esta información se procesa, discute y envía a la Agencia Española del Medicamento para posteriormente tomar decisiones que pueden conllevar desde la modificación de la ficha técnica del fármaco hasta su retirada del mercado. De hecho, tal y como su propio director reconoce, “en España en los últimos tiempos se han retirado muchos medicamentos”.


La pruebas a las que se someten estos medicamentos antes de comercialización son distintas en función del tipo. No obstante, todos pasan por una serie de fases, una primera preclínica en la que se prueba la toxicidad y efectos del fármaco en animales y una posterior fase clínica donde se prueba en voluntarios sanos y en enfermos. Pero a juicio de Carvajal-Pando, “siempre son pocos pacientes los que se someten a estas pruebas en relación con el número que va a utilizar los medicamentos, aunque sean miles, y los periodos de seguimiento también son cortos en relación con la duración de los tratamientos de la práctica clínica, además el tipo de paciente no es el mismo, porque en los ensayos se evitan los extremos, y no se prueban en embarazadas, ancianos, personas demasiado obesas…. “

 
Las reacciones adversas a medicamentos pueden ser leves, como dolores de cabeza, molestias gastrointestinales o erupciones cutáneas, sin embargo, también pueden tener mayor gravedad, como son los de tipo cardiaco o hepático, siendo estos últimos la causa principal de la retirada de medicamentos, apunta el investigador, que considera que la solución no es ampliar el número de personas con quien se prueba el fármaco, sino seguir desarrollando la red de farmacovigilancia y continuar investigando en torno a la variabilidad genética en la respuesta a los medicamentos.