Tecnología España , Salamanca, Martes, 11 de mayo de 2010 a las 14:56

Investigadores de la Universidad Pontificia de Salamanca analizan el uso del 'e-book' en diferentes edades

La actitud de los lectores habituales de las bibliotecas es positiva ante los nuevos dispositivos lectores

Adriana Duque Franco/DICYT Un grupo de investigación formado por expertos de la Facultad de Comunicación de la Universidad Pontificia de Salamanca y el equipo técnico de la Fundación Germán Sánchez Ruipérez de Peñaranda de Bracamonte está llevando a cabo una investigación acerca del uso del libro electrónico o e-book que realizan grupos de diferentes edades: mayores, edades medias y jóvenes; además de los propios bibliotecarios. Aunque la investigación se encuentra aún en fase de desarrollo, las primeras conclusiones indican que los usuarios tienen una actitud positiva ante los lectores de libros electrónicos, pero aún existen muchas dudas acerca de cómo va a evolucionar esta tecnología.


Según explico el investigador en declaraciones a DiCYT Javier No, profesor del Laboratorio Orion Medialab de la Facultad de Comunicación, el objetivo del proyecto es generar un modelo de utilidad para cada uno de los grupos de edades. En realidad son trabajos distintos dentro de una investigación aplicada, porque la idea es estudiar a cada grupo de forma independiente del otro. La pregunta es "qué hay que hacer con los mayores en su adaptación a las nuevas tecnologías para la lectura, qué hacer con los medianos y qué hacer con los pequeños, siempre pensando que la biblioteca del mañana va a ser distinta", afirma.

 

Las novedades tecnológicas obligan a que las bibliotecas tengan que cambiar. ¿Cómo lo van a hacer? "No lo sabemos, pero por lo menos vamos a ver en el usuario de diferentes edades cómo perciben este cambio", comenta. La biblioteca pública debe seguir jugando un papel clave en el fomento de la lectura, en la dinamización cultural del territorio y en la mejora del acceso a la información de los ciudadanos, según el investigador.

 

El proyecto prevé la realización de cuatro fases programadas para ser ejecutadas hasta el 2011 y divididas en: bibliotecas, adultos de más de 55 años, población de 18 a 54 y el grupo de 9 a 17 años. La primera etapa, se desarrolló con un grupo de bibliotecarios de Peñaranda y Salamanca, donde surgieron conclusiones tales como el valor que le da este grupo a la sencillez del manejo de los libros electrónicos, su portabilidad y su bajo peso. Asimismo valoraron de manera positiva la posibilidad de almacenamiento de muchos títulos en un solo dispositivo. Sin embargo, aún encuentran que la herramienta presenta algunos fallos en cuanto a presentación de los contenidos.

 

En la actualidad se está ejecutando la segunda fase del proyecto, denominada De la piedra al ebook. En ésta, participan un total de 40 personas mayores de 55 años. La muestra tiene como característica común que son socios y usuarios de la lectura en la biblioteca pública ubicada en el Centro de Desarrollo Sociocultural de la Fundación Germán Sánchez Ruipérez en Peñaranda de Bracamonte. Para esta etapa del proyecto, la muestra se dividió en dos: un grupo experimental y el otro de control, a los que se le realizó una formación previa para igualar conocimientos, con respecto al uso de la herramienta, así como un test previo.

 

Con un libro de Luis García Jambrina

 

El libro de Luis García Jambrina El manuscrito de piedra, fue el elegido para esta fase de la investigación. El grupo control debía leer el libro y volver en la fecha que estipuló el equipo investigador. El grupo experimental, por su parte, debía leer de forma individual, grupal y participar de las actividades que el equipo investigador del Centro de Desarrollo Sociocultural proponía. Allí se trabajaron estrategias de dinamización de la lectura, actividades guiadas y dirigidas por el equipo, basadas en la experiencia que este centro tiene en el tema de dinamización de la lectura.

 

El objetivo era comprobar la receptividad de los usuarios. "Se puede percibir que la actitud y la disposición hacia ese tipo de tecnologías ahora es buena, a pesar de que eran dispositivos que antes rechazaban", indica Javier No. Sin embargo, aún no hay nada concluyente. "Todavía somos muy cautos; el e-book se ha recibido bien, pero no sabemos si la actitud cambiará en otras tecnologías que están surgiendo y en nuevos desarrollos", señala.

 

Apropiación del e-book en públicos de diferentes edades. Estrategias de acompañamiento y definición de un modelo de utilidad referenciado a la biblioteca fue uno de los dos proyectos de esa línea que aprobó la Junta de Castilla y León a través de la Consejería de Educación, en el programa de apoyo a proyectos de investigación para las universidades privadas de Castilla y León, asignándole el 100% de los recursos solicitados por el equipo de investigación.
 

 

El iPad en el horizonte 
 
En este campo entra en juego un componente nuevo, el iPad, un tablet PC desarrollado por Apple que presta mas servicios que los e-reader, es decir, que los de un mero lector. En los meses que lleva este grupo desarrollando la investigación, al menos un 20% de los dispositivos se han tenido que cambiar, lo que "significa que la tecnología es emergente, en sí misma es débil, porque aún tiene muchos fallos en el software y aunque los e-reader son baratos y van a seguir bajando, estamos en un momento de incertidumbre, la tecnología no está madura y la que está madura tiene sus desventajas", afirma Javier No. Éste es uno de los inconvenientes cuando entran al mercado dispositivos como los iPad, "no sabemos si en la lectura, otras tecnologías van a afectar el desarrollo de los dispositivos de tinta electrónica, aún no se sabe si se le va a dar la vuelta a la investigación", afirma No.