Alimentación España , Salamanca, Viernes, 01 de febrero de 2008 a las 16:46

La falta de agua y la presencia humana provocan la pérdida de especies de aves en el azud de Riolobos

SEO/Birdlife solicita a la Junta que aumente el caudal para preservar uno de los humedales más importantes de la región

JPA/DICYT El bajo nivel del agua en el azud de Riolobos unido a la creciente presencia humana está provocando la desaparición de algunas especies de aves en este humedal, el más importante de la provincia de Salamanca y uno de los más destacados de Castilla y León, según denuncia la Sociedad Española de Ornitología (SEO/Birdlife). Este colectivo ha solicitado a la Junta que aumente el caudal, una medida que podría suponer el regreso de algunas aves que no se han visto en los últimos años.

 

"Debería llevarse a cabo un llenado del azud hasta unos niveles ecológicos adecuados, porque pensamos que así volverían a aparecer algunas especies que ahora se han perdido", ha declarado a DICYT el coordinador de SEO/Birdlife en Salamanca, Rafael Vicente. "Desde hace 10 años realizamos un censo de todas las especies y tenemos una gran base de datos, de forma que hemos observado cómo algunas aves han dejado de acudir, principalmente por la falta de agua y por actividades humanas como el exceso de pesca deportiva", indica. Por ello, el grupo ha remitido un dossier a la Consejería de Medio Ambiente en el que se recogen todos los datos y se pide una intervención inmediata.

 

El caso más grave es el de la malvasía cabeciblanca, una especie en "estado crítico de extinción" que se detectó en Riolobos por última vez a finales de 2002, apenas siete u ocho ejemplares que no se han vuelto a ver. El chorlito patinegro y la cerceta carretona son otras dos especies que han corrido la misma suerte, aunque la última sí se puede observar en otros puntos de la provincia. Además, hay otras aves que, aunque no han desaparecido por completo, sí han sufrido un gran retroceso, como la espátula o la cigüeñuela, que "en apenas tres años ha caído en picado, al pasar de 100 nidos a tres o cuatro", apunta el coordinador.

 

Eutrofización

 

El azud de Riolobos es un espacio con más de 250 especies de aves que llegó a registrar más de 10.000 ejemplares en 2002, cifra que desde ese año no ha hecho más que descender, según los censos que SEO lleva a cabo. "Resulta un enclave estratégico, porque se sitúa entre las Marismas de Santoña y Doñana", explica Rafael Vicente. Sin embargo, el descenso en el caudal ha provocado una eutrofización, es decir, un exceso de vegetación en el agua que ha provocado la huida de muchas especies para las que ya no resulta un lugar adecuado, a pesar de estar declarado como Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA) por parte de la Administración regional.